Los métodos de envasado han ido evolucionando a lo largo de los años, y es uno de los mejores métodos para la conservación de los alimentos. Consiste en calentarlos a una temperatura a la cual los microorganismos que haya, sean destruidos y quede completamente sellado y hermético.
Con el peligro de las bacterias patógenas que causan el botulismo, el método más seguro para conservar la gran parte de los alimentos, es envasarlos bajo una alta presión y una temperatura que ronde los 115-121 º C para su total eliminación.
Existen diferentes tipos de envasadoras, como por ejemplo las Envasadoras al vacío sin cámara, que generalmente son máquinas de uso doméstico y realizan el envasado al vació con la bolsa exterior de la máquina de forma manual; este tipo de equipo tiene que ser usado con bolsas de vacío de tipo gofrada (con textura) en una parte y lisa por la otra ya que la envasadora solo acepta este tipo de envase.
Otro tipo de envasadora, es la Envasadora de campana, la cual tiene un recipiente interno donde se coloca la bolsa con el producto a envasar y se le puede elegir la presión a la que se le someterá al contenido para la calidad del envasado al vacío.
Por otra parte, de cara a las envasadoras industriales, normalmente suelen llevar más de una envoltura para poder llegar a proteger mejor de efectos externos (ya sean bacterias, golpes…) que puedan alterar la estabilidad del alimento envasado.
La envoltura primaria es la que encontramos más cercana al alimento o producto en cuestión, acostumbra a estar en contacto con el producto como por ejemplo un cartón o una botella para líquidos.
Después encontraríamos el envasado o empaquetado secundario, que estaría en contacto con la primera envoltura que recubre el contenido. Este segundo, es normalmente usado para asegurar el mantenimiento y el buen estado del producto durante su transporte hacia el distribuidor o el cliente destinatario. El segundo packaging generalmente se saca y se recicla una vez llegado a su destino aunque algunas veces, este se queda para poder comprar/vender productos en grandes cantidades o a granel.
La correcta elección a la hora de escoger la maquinaria tanto la principal como la secundaria, depende de la necesidad y la situación del producto que se quiera envasar. En general, cada sector o área del embalaje tiene afinidad para cada una de las máquinas dependiendo del sector y del producto a embalar.
Una de las características que hacen más moldeables las envasadoras o máquinas de envasado, es que se pueden colocar en cualquier línea de producción, que es algo a tener en cuenta a la hora de crear el protocolo de confección y preservado de una cadena de montaje.
